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Seguramente comenzaste con una idea de negocio clara: vender esos productos que te apasionan. Un par de prendas de ropa, algunos cosméticos o tal vez unos suplementos alimenticios que estaban en tendencia. Pero casi sin darte cuenta, tu catálogo creció y creció, y ahora tienes más SKUs de los que podrías contar.

Piensa en la última vez que compraste algo en línea: la emoción de recibir tu paquete, el deseo de abrirlo y descubrir lo que hay dentro. Ahora imagina que, al abrirlo, te encuentras con un producto que ya está a punto de caducar. Esa decepción no solo arruina tu experiencia, sino que también despierta una pregunta crucial: ¿por qué no se gestionó mejor este producto?

Seguramente te ha pasado alguna vez en el supermercado: estás caminando por los pasillos y un empleado te ofrece una muestra gratuita de un nuevo producto. Decides probarlo y, para tu sorpresa, te encanta. Esa experiencia de probar el producto en el momento, te lleva a comprarlo cuando probablemente no lo habrías considerado.

En el ecommerce, la situación es diferente. Los clientes no pueden tocar ni probar los productos antes de comprarlos, lo que limita su decisión a lo que ya conocen. Sin embargo, al ofrecer muestras gratuitas, puedes replicar esa experiencia de prueba y potenciar tus ventas. Darles a tus clientes la oportunidad de experimentar un producto sin compromiso puede abrir la puerta a nuevas compras y fortalecer la lealtad hacia tu marca.

Con la esperanza de cambiar la concepción que muchos ecommerce tienen sobre los centros de fulfillment, en esta entrada de blog vamos a hablar claro: en el mundo del ecommerce, donde la gente quiere sus cosas para ayer, con una calidad top y lo más económico posible, el fulfillment tiene un papel importantísimo. Pero, si eres de los que piensan que un centro de fulfillment es una varita mágica, que va a solucionar todos tus problemas, tenemos que tener una conversación seria. Hay muchas cosas que puedes exigir de verdad, con toda la razón del mundo, y otras que debes trabajar por tu cuenta. Porque no, no todo es responsabilidad del fulfillment. ¡Vamos a verlo!

Si vendes botellas de alcohol, ya sabes que la logística de estos productos es un dolor de cabeza. ¿Por qué? Porque las botellas se rompen, y con cada rotura se va un pedazo de tu margen de beneficios. No importa lo bien que te lo vendan, no todos los socios logísticos están a la altura. Necesitas a alguien que entienda que no solo transporta botellas; está manejando la reputación de tu marca y la satisfacción de tus clientes. En este artículo te contamos, bajo nuestra experiencia con este tipo de productos, cuáles son los mayores desafíos al trabajar con botellas de alcohol. ¡Vamos a verlo!

Si trabajas en el sector de la cosmética, ya debes saber todo lo que implica tener un negocio que funcione en este sector. Recibimos numerosas solicitudes de presupuesto de nuevos emprendedores en el sector, con un approach que se aleja mucho de hacer las cosas bien. No se trata solo de tener productos de calidad (que ya es difícil); la logística detrás de esos productos también es clave para que los clientes te amen o te odien. Por ello, en este artículo nos hemos propuesto dar luz a los desafíos a los que nos enfrentamos al trabajar en el sector cosmético. Pero además, te enseñamos cómo elegir un partner de logística adecuado para este tipo de productos. Así que sigue leyendo porque lo que te voy a contar te puede ahorrar más de un dolor de cabeza.

Siempre hablamos sobre lo que los eCommerce deben hacer para prepararse para el Peak Season y remarcamos la importancia de comenzar a planificar con antelación. No obstante, hoy quiero darte una visión detrás de las cámaras: cómo preparamos en Lógicos esta fase crucial del año.

Para nosotros, el Peak Season es tan vital como lo es para ti; si tú vendes más, nosotros hacemos más. Por eso, desde ya estamos afinando cada detalle para asegurar no solo la supervivencia, sino convertir Lógicos en una máquina bien engrasada capaz de enfrentar cualquiera situación que pueda darse. ¡Vamos a verlo!

Seguramente, si estás leyendo esto, llevas un tiempo escuchando sobre la tendencia de vender en Amazon. Tal vez has visto casos de éxito, leído historias inspiradoras, o incluso te has encontrado con algún amigo que no para de hablar sobre cómo su negocio ha despegado gracias a esta plataforma. Sin embargo, cuando decides buscar información, te topas con una avalancha de datos dispersos y términos técnicos que solo te dejan más confundido.

Imagina que estás a punto de abrir tu propia tienda física. Has encontrado el lugar perfecto, decorado con esmero cada rincón y preparado un inventario que promete satisfacer a tus clientes. La emoción está a flor de piel, pero antes de abrir las puertas al público, necesitas tomar una decisión crucial: ¿cómo organizarás tu tienda para ofrecer la mejor experiencia posible a tus clientes?

Muchos dueños de ecommerce comienzan a recibir una cantidad interesante de pedidos y se sienten eufóricos, creyendo que su negocio está despegando. Sin embargo, esta felicidad puede ser efímera cuando se enfrentan a un problema común pero crítico: la dificultad del transportista para encontrar el lugar de destino debido a direcciones incorrectas o mal ingresadas. Este inconveniente resulta en muchos pedidos que terminan regresando al origen, causando gastos adicionales, malestar en los clientes y una significativa pérdida de tiempo y recursos.